Al organizar una boda muchos son los detalles a tener en cuenta, desde los preparativos mas básicos y generales a los más específicos y rebuscados, nada puede descuidarse en un día tan especial del que esperamos quedarnos con un maravilloso recuerdo y dejarlo en las memoria de nuestros invitados.

Precisamente, a los invitados está dedicado este post, pensado en la búsqueda del regalo perfecto para obsequiarles, sin resultar aburrido, intentando sorprender y marcar la diferencia con un detalle que ofrezca una cuidada presentación, sea significativo y si además puede utilizarse pasado el gran día, mejor que mejor. Las opciones que encontramos son muchas y muy variadas, pero no todas suelen ser un acierto si lo que buscamos es diferenciarnos y que la boda sea todo un obsequio para los sentidos.

Un regalo que está muy de moda e impulsa el consumo de productos artesanos y tradicionales, son las mermeladas y confituras. Dan mucho juego a la hora de personalizar los envases, recurriendo a una presentación coqueta como frascos de cristal y estos costumizarlos con telas y cordeles. Se pueden preparar todos iguales, en cuanto a decoración y sabor, o bien alternar estilo e ingrediente, permitiendo a los invitados elegir el que mas les guste. Son el broche perfecto a bodas de estética campestre y ambientes bucólicos.

Al igual que se pueden utilizar los frascos de cristal para la propuesta anterior también pueden ser una gran opción para rellenarlos de caramelos y golosinas, un recuerdo muy dulce y original, que si además logramos que el envoltorio de los dulces sea personal y aparezcan los nombres de los novios y la fecha será mas especial.

Los jabones aromáticos están muy de moda y podrían ser una gran alternativa para regalar a nuestros invitados. Los olores son muy variados, cada vez encontramos propuestas mas sorprendentes con olores de frutas, cócteles y perfumes. La clave de la presentación, además de la forma del jabón, está en el envoltorio, un formato atractivo será un gran complemento del producto en si.

Un obsequio que cada vez cobra mas protagonismo en este tipo de celebraciones, son los benjamines de cava o champagne, en los que un plus de exclusividad sería personalizar la etiqueta y adornar la botella con algún discreto y elegante detalle.

Un bálsamo labial puede ser una buena opción, muy femenino y por lo general es algo que todas la mujeres utilizan para hidratar y dar algo de vida a sus labios. Las cajitas se pueden personalizar tanto en el diseño del envase como en la presentación del mismo.

Un recuerdo que luego puede utilizarse para guardar cositas pequeñas como pendientes, anillos, botones o pintalabios, entre otras cosas, son bolsitas costumizadas, buscando un diseño elegante que nos identifique y sirva para recordar una fecha tan especial.

Algo que nunca falla son los bombones, pero no presentados de cualquier manera, sino con un apropiado packaging que convierta el regalo en algo exclusivo y personal.

Y como última idea, y no por ello menos creativa sino todo lo contrario, un presente que gusta mucho y hace sentir especial, sería ofrecer unas pequeñas plantitas, un bonito recuerdo que perdura con el tiempo y veremos crecer.

Algo realmente sorprendente, que gusta mucho y requiere cierta implicación por parte de lo novios, es preparar unas láminas recordatorio de diseño a modo de tarjeta, donde se narra a través de imágenes y frases parte de la historia de la pareja (recuerdos, momentos clave de la relación y que deseen compartir…). Otras buenas alternativas pueden ser velas aromáticas, kits anti-resaca, pequeños neceseres de aseo, abanicos… 

Como veis, toda opción tiene algo que le hace atractiva, la elección dependerá del estilo de la boda, del gusto de los novios y del ambiente que rodee la celebración. En todas ellas, los puntos comunes son la admiración por las cosas bonitas, la exquisitez, la decoración y la presentación y el cuidado por los detalles.