En lugar de elegir una balada romántica tradicional para su primera canción, algunas parejas toman un tono más movido, como “Margaritaville” o “Brown Eyed Girl”. Los invitados no se lo esperarán y la sorpresa es uno de los elementos esenciales de la comedia.

Una de las formas más divertidas para amenizar una boda es mediante la creación de un brindis divertido y lleno de humor. Cualquiera puede escribir un brindis que deja a la gente con los ojos llorosos, pero se necesita alguien especial para escribir uno que los haga reír.

Los invitados esperan que las novias usen zapatos blancos tradicionales, pero ¿qué si ella lleva un par de zapatos para correr bajo el vestido?. Solo un destello de unas divertidas zapatillas color rosa es suficiente para hacer sonreir a las personas.

El pastel en sí puede ser divertido, especialmente cuando se hace por un profesional. Un pastel que recrea cómo se conoció la pareja o dónde tuvieron sus primeras vacaciones puede fácilmente hacer sonreír a los demás.

En lugar de usar flores para los centros de mesa, un centro de mesa que use los intereses de la pareja puede ser divertido. Imagina un centro de mesa lleno de pelotas de golf y zapatos de tacón alto en lugar de flores.